Como ya comentaba el otro día, este fin de semana teníamos reunión de los distintos GDG, y la verdad es que la reunión no ha defraudado.
Comenzamos la mañana con la presentación de Andrés, viejo conocido de las comunidades del Software Libre, y que es el nuevo Google DevRel para la península. Ya habíamos hablado alguna vez, y es bueno saber que tenemos un DevRel y con ideas muy interesantes, gracias a la dilatada experiencia en el mundo de las comunidades de desarrolladores.
Tras una breve presentación de cada GDG, seguimos el día con la presentación de las experiencias, unas positivas y otras no tanto, de la gente de GDG Barcelona, GDG Tarragona y GDG Lleida. La idea clara es que los GDG no debían ser tanto un grupo de organizadores de eventos, sino un punto de encuentro de personas más allá del clásico «curso de introducción a Android» que quieran innovar alrededor de tecnologías de GoogleTM y sobre todo que busquen divertirse con lo que hacen. Y con esas ideas empezamos a hablar del DevFest de 2013, y así llegamos a la hora de la comida.
Tras la comida, desde GDG Bilbao presentamos la iniciativa de «Retos, ¿a que no hay huevos?», encaminados a atraer a distintos perfiles de desarrolladores (estudiantes, empresas y personas independientes) a los GDG. Y parece que la idea ha cuajado, y en breve contaremos más sobre su puesta en marcha. Por cierto, nuestro grupo ya está oficialmente en incubadora según el Directorio de grupos de Google, gracias a Aritz.
La tarde también fue abierta, y se presentaron otras comunidades como las de HTML5-Spain, Python Madrid, Java Hispano, Grupo de Usuarios de Groovy de Madrid o la Fundación Promete. Un ejemplo más de la idea de acercar los GDG al ecosistema de desarrolladores, emprendedores, etc.
Y acabamos el día hablando de los siguientes pasos de los GDG, como son:
- Organización de varios DevFest en la península
- Visilidad y participación de los GDG nacionales fuera de nuestras fronteras
- Nuevas iniciativas como un roadshow, los retos, etc.
Y para terminar, cerramos el día con una cena a base de ligeras viandas acompañadas de sidra en La burbuja que ríe, oyendo gaitas y todo.
Como cualquier reunión de este tipo, ha servido para desvirtualizar a muchos conocidos, conocer gente con iniciativa y energía, además de frikear con cacharros como los Chromebook Pixel, el Pebble, y como no, unas GoogleTM Glass… Así que se puede decir que ha sido un sábado de lo más completo, y ahora a preparar los siguientes pasos…