Últimamente se ha venido rumoreando la posibilidad de que Google ofrezca almacenamiento on-line, lo que se ha venido en llamar GDrive. Y está claro que la red se está convirtiendo en una plataforma base para el desarrollo de aplicaciones cada vez más potentes, algo así como un sistema operativo on-line que permite disponer de aplicaciones que se comunican entre sí usando los protocolos de internet, y donde la interfaz de usuario utiliza un navegador web para presentar la información y permitir la interacción de los componentes. El último ejemplo que he visto es la integración de informes de Business Intelligence con Zoho usando Zoho DB.
Pero claro, por ahora, no siempre tenemos conexión, o no con la calidad que nos gustaría, y es ahí donde soluciones como Google Gears cobran sentido. Quizás, el futuro de los sistemas operativos no sea tanto el escritorio si no en su capacidad de conectarse a la red y permitir el trabajo tanto on-line como off-line de forma consistente, y para eso sólo sería necesario un navegador Web.
Por tanto, cada vez está más presente la ubicuidad de internet. Y quizás sea ésta una de las razones que están provocando una nueva guerra de navegadores en los dispositivos móviles, con aquellos basados en WebKit, frente a los desarrollos de Opera y Microsoft, o la entrada de Mozilla en la pelea, además de los clásicos OpenWave, NetFront y otros más ligados históricamente a los móviles. Para acabar de rematar, tenemos la plataforma Android (¿era necesario otro consorcio?), aunque también usa un navegador basado en WebKit.